Plataforma tecnológica del CNE pasó la prueba en el simulacro

  • En solo 3% de los centros observados se reportaron fallas en la máquina de votación y el captahuellas 
  • Destacó la alta afluencia de personas durante la jornada y el traslado de electores con bienes y recursos públicos. 
Foto: OEV.

El simulacro, además de permitirle al elector interactuar con el sistema automatizado de votación, sirve para probar todos los elementos técnicos y realizar pruebas de transmisión de resultados para monitorear su comportamiento y evaluar su eficiencia. En este sentido, la jornada de este domingo 30 de junio cumplió los objetivos.

El Observatorio Electoral Venezolano (OEV) desplegó parte de su red nacional independiente, en esta oportunidad con 100 observadores, distribuidos en 23 estados y en Distrito Capital. Los Observadores asistieron a la jornada, de forma presencial, durante varias horas y en distintas franjas horarias y registraron sus impresiones con rigurosidad e imparcialidad.

De acuerdo con los reportes obtenidos, 73,2% de los observadores no presenciaron demoras o interrupciones durante el proceso del simulacro. En solo 3,1% de los puntos estas demoras estuvieron asociadas a fallas en la máquina de votación y el captahuellas.

El comprobante que arrojó la máquina de votación coincidió con la opción que aparecía en pantalla. De acuerdo con su experiencia, 87,6% de los observadores consideran que el proceso para elegir al candidato es poco o nada complicado.

Así mismo, cerca del 90% de los observadores califica positivamente el funcionamiento de la herradura. 

No obstante, casi la mitad de los observadores indicó que los electores parecían entender parcialmente donde o como votar, o lo entendían poco o casi nada. 

Esto guarda relación con la ausencia de una campaña institucional por parte del CNE que sea lo suficientemente robusta como para que el elector comprenda a cabalidad cómo funcionan los instrumentos de votación. Las ferias electorales, que deben activarse hasta el 27 de julio, representan una oportunidad para saldar esta carencia informativa.

Sobre la participación

La afluencia de personas fue alta en 44,3% de los puntos visitados. Esto muestra que el CNE hizo un despliegue representativo que permitió acercar los puntos del simulacro a la población. 

De acuerdo con el balance oficial, el simulacro tuvo un alcance en 58% de las parroquias del país y se registraron 2,29% de incidencias en máquinas de votación, 0,90% de incidencias en el sistema de autenticación integral y 0,70% en memorias removibles. 

“Probamos los centros nacionales de totalización, los medios de comunicación para transmitir los resultados electorales y todos los mecanismos de seguridad que blinda el voto de las electoras y los electores”, declaró el vicepresidente del CNE, Carlos Quintero. 

El desempeño del personal del CNE fue bueno (53,6%), muy bueno (28,9%) y regular (15,5%), de acuerdo con la red del OEV. La actuación de los organismos de seguridad fue buena (49,5%) y muy buena (27,8%).

Además de los funcionarios del Plan República y la Milicia Bolivariana, estuvieron presentes la Policía Nacional Bolivariana (57,7%), la Policía regional o municipal (41,2%) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (12,4%).

Los lunares del simulacro

El simulacro electoral de este domingo 30 de junio se caracterizó por la alta participación, pero también por el traslado de electores con recursos y bienes del Estado

De acuerdo con los reportes recibidos, 73,5% de los observadores presenció la movilización de votantes principalmente con recursos de alcaldías y gobernaciones.

A pesar de que el artículo 145 de la Constitución señala que “los funcionarios públicos y funcionarias públicas están al servicio del Estado y no de parcialidad alguna”. 

En el mismo sentido, cabe destacar que el artículo 13 de la Ley Contra la Corrupción establece que: “Los funcionarios y empleados públicos están al servicio del Estado y no de parcialidad política o económica alguna. En consecuencia, no podrán destinar el uso de bienes públicos o los recursos que integran el patrimonio público para favorecer a partidos o proyectos políticos, o intereses económicos particulares”.

El artículo 70 de esta misma normativa contempla sanciones para el funcionario público que, abusando de sus funciones, utilice su cargo para favorecer o perjudicar electoralmente a un candidato, grupo, partido o movimiento político.

Sin embargo, el acarreo de electores con bienes y fondos públicos sigue siendo una práctica ventajista que favorece a candidatos en posiciones de poder.

Reaparecen los puntos partidistas  

El despliegue de puntos partidistas en los alrededores de los centros también fue notable. Más del 80% de los observadores identificó la presencia de puntos oficialistas en los alrededores de los centros.

Foto: OEV.

Mientras que 5 de cada 10 observadores reportaron activismo político o actividades de propaganda electoral, siendo casi un 80% a favor del candidato Nicolás Maduro y 6,2% a favor de Edmundo González Urrutia.

Foto: OEV.